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Sant Joan 2024: tradiciones, fuego y celebraciones
jun
La verbena de Sant Joan se acerca y con ella llega una de las noches más especiales del año. En toda España, especialmente en Cataluña, se organizan diversas actividades y tradiciones que permiten vivir esta celebración de maneras muy distintas: desde las fallas del Pirineo hasta las fogueras de Alicante, pasando por las festivas celebraciones de Sant Joan en Ciutadella, Menorca. A continuación, te ofrecemos una guía completa con diez propuestas para disfrutar del solsticio de verano y de Sant Joan 2024: fuego, pólvora y hogueras en la playa. ¡No te lo pierdas!
La Noche de la Verbena de Sant Joan
La noche de la verbena de Sant Joan es sinónimo de diversión, fuego y una profunda identidad cultural. Es considerada por muchos como la noche más corta del año. Aunque el solsticio de verano es el 21 de junio, la celebración se realiza la noche del 23 de junio, en una fecha cercana al solsticio.
En toda Cataluña, se sigue la tradición de celebrar con la llegada de la Flama del Canigó, traída por voluntarios, que enciende las hogueras en ciudades y pueblos. Las calles se llenan de revetllas (fiestas populares), correfocs (desfiles de fuego), conciertos y muchas otras actividades.
Orígenes y Tradiciones
El origen de la celebración de la Noche de Sant Joan es pagano y forma parte del grupo de fiestas solsticiales, como la Navidad. Esta tradición se remonta a mucho antes de la implantación del cristianismo. La verbena de Sant Joan es una celebración que la Iglesia Católica hace coincidir con el nacimiento de San Juan Bautista, y ha evolucionado para incorporar elementos y costumbres muy marcados y simbólicos: el fuego purificador, los baños de medianoche, las hierbas de Sant Joan, las canciones, los bailes y otros rituales mágicos.
Una de las delicias más tradicionales de esta festividad es la coca de Sant Joan, que ahora se presenta en muchas variedades: con fruta, piñones, chicharrones, y rellena de crema o nata. Esta coca es una derivación del tortel con huevos duros que se comía antiguamente, una gran pieza redonda con claras reminiscencias de culto al sol.
Fogueres de Sant Joan en Alicante
Las Fogueres de Sant Joan en Alicante son una de las fiestas más importantes del País Valenciano. Desde el 1 de junio, la ciudad se llena de mascletades (disparos de petardos), hogueras y verbenas para celebrar esta fiesta llena de arte, música y pólvora. En 1984, las fogueres fueron declaradas oficialmente bien de interés turístico internacional.
El 23 de junio por la noche, a partir de las 22:00, se organizan verbenas en barracas y racons (esquinas). El 24 de junio, a las 14:00, se realiza una mascletà, y a la medianoche comienza la cremà (quema) de las hogueras oficiales. La fiesta se extiende hasta el 29 de junio, día en que se pone fin a las fogueres con un castillo de fuegos artificiales a medianoche.
Los Caballos, Protagonistas de Sant Joan en Ciutadella
En Ciutadella, Menorca, Sant Joan es una de las fiestas más conocidas y esperadas. El 23 de junio marca el inicio de dos días de celebraciones. Con el primer toque del flabiol (flauta pequeña) al mediodía, la fiesta comienza y la ciudad se llena para celebrar esta tradición. El acto principal del día es el Caragol des Born, donde los caballos saltan al son de la música jaleo. Al anochecer, la Qualcada (procesión de jinetes) vuelve a las calles para las carreras en la plaza y el Caragol de Santa Clara. La jornada termina con la Beguda en la casa del caixer senyor (el líder de la fiesta).
El día siguiente, el día de Sant Joan, Menorca madruga y se llena de caballos y juegos con los Jocs des Pla, que se celebran desde 1661. Durante todo el día hay diferentes actos que se extienden hasta bien entrada la madrugada, con el último toque del flabiol.
Noche de Falles en el Pirineo
Desde 2015, las fallas de Isil, en el Pallars Sobirà, forman parte del patrimonio cultural inmaterial de la UNESCO, junto con otras festividades del solsticio de verano en el Pirineo. La primera referencia contemporánea de esta fiesta es de 1902 y su estructura se ha mantenido prácticamente intacta hasta ahora. Se celebran en muchos lugares del Pirineo, como Boí, Casós, el Pont de Suert y Vilaller (Alta Ribagorça).
En Isil, el 22 de junio a las 22:15 se realiza el correfoc; y a partir del 23 de junio por la noche, comienza la bajada de fallas del Faro. La espectacularidad de la fiesta radica en que mientras las calles y plazas están a oscuras, la montaña se ilumina. Decenas de portadores, con un tronco encendido al hombro, crean una zigzag de fuego deslumbrante que se puede ver desde los pueblos.
Fiesta de l’Haro y el Taro
En los pueblos de Arties y Les, en el Valle de Arán, se mantiene una tradición ancestral: la fiesta de l’Haro y el Taro. La noche de Sant Joan gira en torno a l’Haro (Les) o el Taro (Arties), un tronco de abeto seco que ha estado plantado durante el último año en la plaza homónima y que, al llegar el 23 de junio, se quema mientras se bailan danzas aranesas. El fuego se enciende al grito de “taró huec”, que en aranés significa “fuego al taro”. El momento culminante de la fiesta es la quema de l’Haro, cuando atan el tronco ardiente con cuerdas y lo arrastran tumultuosamente por el pueblo, a ritmo de charanga. Es un ritual donde las llamas y las cenizas se encargan de alejar los espíritus malignos y agradecer a los dioses el éxito de las cosechas y la llegada del buen tiempo.
Bajada del Río en Camprodon
El agua es otro de los elementos característicos de Sant Joan. En Camprodon, la Festa Major adquiere una importancia especial. La fiesta se celebra del 15 al 24 de junio, pero el acto más espectacular es el sábado 22, con la bajada de la Font de Sant Patllari. Se realiza después del almuerzo popular, que comienza a las 13:30. A las 17:30, se lleva a cabo la remullada (remojada) popular en el río, frente al Pont Nou. Los jóvenes se embarran en la fuente y recorren las calles del pueblo mientras los vecinos les lanzan agua. El día 23 también hay varias actividades destacadas, como la llegada de la Flama del Canigó a las 17:30, en la plaza de la Vila.
Muskhaa, The Tyets y Julieta en el Festival Ítaca
La playa Gran de l’Estartit (Baix Empordà) será el escenario del Festival d’Ítaca, que aporta un toque musical a la fiesta de Sant Joan. Encabezan el cartel Julieta, Mushkaa y The Tyets, el trío más destacado del panorama urbano catalán actual. La noche se abrirá con el grupo del Baix Empordà Clase B y cerrará con DJ Trapella alrededor de las tres de la mañana. También se podrá disfrutar de las actuaciones de Foguera y Cavall de Troia.
Cremada de Falles en Andorra la Vella
El elemento central de la fiesta de Sant Joan en Andorra es la cremada de falles. El 23 de junio a las 19:00 se recoge la Flama del Canigó en la plaza del Consell y a las 22:30 comienza la cremada de la falla tradicional. A medianoche, se enciende la foguera en la plaza de Guillemó. Este año, los fuegos artificiales serán sustituidos por un espectáculo de luces láser de unos veinte minutos.
La Vall de Núria se Ilumina de Antorchas
En un entorno natural como el de la Vall de Núria (Ripollès), la verbena de Sant Joan adquiere un encanto especial. Las antorchas se encienden en el mirador de la Creu d’en Riba al atardecer y se comienza a caminar hasta el embalse de Núria, creando un contraste entre la oscuridad y la luz del fuego. Una vez se llega al destino, se enciende la tradicional foguera flotante. El acto se realizará la noche del 23 de junio.
La Flama del Canigó
Como cada año, la Flama del Canigó nace en la cima del Canigó, en el Conflent, y se distribuye a lo largo de los Países Catalanes. El 23 de junio, descenderá del pico y del Coll d’Ares alrededor de las seis y media de la mañana.
Crema de Bujots en Sant Lluís
En Sant Lluís (Menorca) se mantiene la tradición de los Bujots para Sant Joan. Estos muñecos de paja satíricos decoran las puertas de los vecinos de Sant Lluís durante los días previos, pero la noche de Sant Joan llegan a su fin. Una comparsa de gigantes y grallers (flautistas) recorre la villa recogiendo todos los bujots y llevándolos al lugar de la fiesta de Sant Joan. Allí se realiza el concurso y se decide el mejor bujot del año, antes de ser quemado en la foguera de Sant Joan. A partir de entonces comienza la fiesta, en la que se reparten dulces entre los asistentes.
